¿Qué diferencias hay entre una incubadora, aceleradora y ‘venture builder’?

Javi Cánovas
08.01.18 15:40 Comentario(s)

El ecosistema emprendedor ha sido testigo de la aparición y evolución de conceptos y términos para definir su actividad: incubadora, aceleradora, venture builder, espacios de coworking… pero, ¿sabes cuáles son las características de cada uno? Incluso para los que están dentro del sector, puede haber cierta dificultad a la hora de definir cada modelo, y es que los límites entre uno y otro pueden ser difusos.

 

En este post veremos las principales características de los tres grandes modelos: incubadora, aceleradora y venture builder

 

Incubadoras

Las incubadoras de empresas fueron las primeras en surgir en el ecosistema emprendedor. Aparecieron en la década de los 50 en Silicon Valley, California - a partir de iniciativas relacionadas con universidades, cuyo objetivo era promover la transferencia de tecnología desarrollada en la universidad hacia las empresas. En Europa, las primeras surgieron en Inglaterra y en los 80 se empezó a extender la estructura de incubadora actual.

Principalmente, una incubadora de empresas:

  • Ayuda al emprendedor desde el minuto cero, por eso son especialmente relevantes en las fases pre-seed y seed
  • Acoge a los emprendedores en torno a un mismo espacio físico donde pueden trabajar - a buen precio y con los recursos que necesitan
  • La financiación sigue su curso natural (FFF, BA e inversores), sin premios ni recompensas como puede ocurrir con algunos programas de aceleradoras

 

Aceleradoras

El concepto de aceleradora nació un poco más tarde, de la mano del inglés Paul Graham cuando en 2005 lanzó Y Combinator en Silicon Valley.  A diferencia de las incubadoras, las aceleradoras ayudan a crecer un proyecto que se encuentra un poco más avanzado (normalmente ya cuentan con un modelo de negocio testado y un equipo formado, pueden incluso estar facturando a sus primeros clientes, aunque en cualquier caso se encuentran en una fase inicial) - y lo que hacen es acelerarlo para que crezca más rápidamente.

Normalmente, una aceleradora de empresas:

  • Ayuda a traccionar y escalar el negocio de proyectos, los cuales reciben un “empujón” donde más lo necesitan 
  • Escoge las startups mediante procesos y convocatorias, donde compiten entre ellas y eligen aquellos que reúnen ciertas características
  • La financiación que proporciona suele ser un intercambio por una pequeña parte del equity de la startup (acciones), que suele oscilar entre un 5-15%

 

Venture Builder (VB)

También se las conoce como startup factories o startup studios, y una de las pioneras en este campo es la alemana Rocket Internet. Es el concepto más novedoso y el que ha llegado más tarde a nuestro país, pero que se encuentra actualmente en auge y es de esperar que cada vez surjan más compañías con este modelo. 

Entre las características de una VB destacamos:


-Las ideas son generadas por la VB (ya sean propias o copy-cut de ideas validadas en otros mercados)

-Expertos en mentorización y emprendeduría validan el modelo de negocio hasta que funciona de manera autónoma

-Como principal socio del proyecto, destina el 100% de sus recursos a la empresa

 

Como decíamos al principio del post, dar con una definición universal para cada uno de los conceptos es complicado, pues todas tienen un grado de similitud y pueden compartir rasgos en común. Además, surgen nuevos enfoques que combinan varias características, como es el caso de nuestra venture builder, Customia:

-Ayuda al emprendedor desde el momento cero, pero también puede entrar en una fase más avanzada para detectar y reforzar las áreas que más lo necesiten

-Aporta el equipo necesario para desarrollar e impulsar el proyecto - mentorización, asesoramiento estratégico, marketing, IT

-Su mayor ventaja es la aportación tecnológica propia - lo cual reduce tiempos de desarrollo y lanzamiento

-Acepta ideas externas pero también puede generar ideas propias

-Asume y comparte el riesgo con el emprendedor, a cambio de una parte del equity de la startup 

 

Una de las características centrales del modelo de Customia es la validación de la idea y del modelo de negocio - lo que permite emprender con una mayor seguridad y reduciendo el riesgo

 

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